lunes, 12 de noviembre de 2007

CONOCER A JUAN CAÑADAS DE disemdi

Soy Juan Cañadas. Una persona humilde nacida en Albacete hace 29 años cuando la primavera descongelaba la ciudad del crudo invierno. Siempre fui un niño muy soñador, muy imaginativo. Rodeado siempre de creatividad.



Quizá nunca se puede tener lo que uno quiere, y a los quince años abandoné las clases para dedicarme a trabajar. Desde pintor de brocha gorda hasta zapatero, pero en mi casa estuve enfrascado en mi peculiar creatividad. Mi forma de liberación, de expulsar todas esas ideas que me martilleaban mientras encolaba unos zapatos de charol, o esa melodía que se me encerraba en mi sesera mientras recortaba con tonos pálidos la moldura de una pared.



He pintado –de pequeño fui ganador del concurso Nestlé que promocionaban por las escuelas –, he tocado la guitarra, soy un fanático de la música. Desde el Pop más independiente hasta el Metal más extremo. Me encanta el cine. Desde el cine de autor hasta directores del palo de Tim Burton, James Cameron…

Hoy en día mi proyecto “artístico” se centra en la fotografía y también en la escritura.



Desde crío me apasionó también la tecnología. Todo viene de aquél regalo que mis padres le endosaron a mi hermano por navidades. Aquél flamante MSX. Desde entonces he estado muy ligado a los ordenadores y videojuegos. Y a toda la tecnología que mi bolsillo me ha podido permitir.



Estuve trabajando como moderador de uno de los foros más importantes de videojuegos de este país y a día de hoy mi actividad cibernética estaba en hibernación. Únicamente algún comentario sobre discos y algo intimista en mi blog para liberar mierda de mi cabeza, hasta que me han despertado para empezar esta nueva andadura.



Un nuevo aire fresco en las maneras de crear información digital. De la mano de gente que nunca a tenido la oportunidad por motivos varios y que se le abren la puertas de par en par. Una buena bocanada de aire fresco de hacer periodismo y lanzar información de las manos de gente tan de a pie como tú y yo.



Hay esperanzas hasta en la nueva prensa. Bienvenida sea y gracias.